La elección de Mauricio Rodas como alcalde de Quito en 2014 marcó un punto de inflexión en Ecuador, ya que fue la primera victoria electoral de la derecha durante el gobierno de Rafael Correa. Planteo que el candidato triunfante logra interpelar a las crecientes clases medias a través de estrategias simbólicas de campaña que giran en torno a la supuesta superación tanto de las ideologías como de la conflictividad en las luchas políticas. Desde una perspectiva bourdieuniana, demuestro que el éxito de Rodas reside en llenar un vacío del modelo de representación de la “Revolución Ciudadana” mediante la oferta de un espacio de identificación que acoge a las clases medias consumistas. Para dicho fin, la inversión del discurso oficialista del “Buen Vivir” hacia el discurso ganador del “Vivir Mejor” resulta pivotante. Siguiendo las huellas del asesor de marketing político, Jaime Durán Barba, se vislumbran las conexiones regionales de las nuevas derechas latinoamericanas.