Hannah Arendt is commonly criticized for defining action as an end in itself of horizontal power and of councils as an alternative to representative democracy that is unrealistic and unrealizable. In contrast, I show how much Arendt was concerned about the dangers of these concepts: the replacement of action by fabrication, of power by domination and violence, and the im- possibility of a council democracy in the face of a highly administrative and depoliticized society. Arendt shows how these hybrid forms revealed their pure forms as a hidden tradition in revolutionary situations. The supposed incompleteness and failure of a struggle for another society can therefore be understood as a recurring possibility and reality and thus as a specific condition of the political. The critique of the hybrid form also includes the critique of modern scientific thought and political thought.
Se suele criticar a Hannah Arendt por definir la acción como un fin en sí mismo, y el poder horizontal y los consejos como una alternativa irreal e irrealizable a la democracia representativa. Frente a ello, muestro hasta qué punto Arendt estaba preocupada por los peligros de estos conceptos: la sustitución de la acción por la fabricación, del poder por la dominación y la violencia, y la imposibilidad de una democracia de consejos frente a una sociedad altamente administrativa y despolitizada. Arendt muestra cómo estas formas híbridas revelaron sus formas más puras como una tradición oculta en situaciones revolucionarias. La supuesta incompletud y el fracaso de la lucha por otra sociedad pueden entenderse, entonces, como una posibilidad y una realidad recurrentes y, por tanto, como una condición específica de lo político. La crítica de la forma híbrida incluye también la crítica del pensamiento científico y del pensamiento político moderno.