Con cierto orgullo, en un catálogo de la colección “Obras representativas” publicado al comienzo del nuevo milenio, la UNESCO dio a conocer un balance impresionante: una lista de más de 1300 obras literarias que provienen de más de 80 países diferentes y de cerca de 100 lenguas originales. Desde el año 1948 y gracias a los programas de cooperación e intercambio cultural, se traducen bajo los auspicios de la UNESCO obras de la literatura mundial que se publican generalmente en colaboración con editoriales del mundo entero. El catálogo de octubre del 2000 no solamente ilustra el resultado notable de uno de los proyectos de traducción literaria más amplios y ambiciosos sino que permite también, mirando más de cerca los títulos y las fechas de publicación, formarse una idea sobre el concepto universalista, la historia y la extensión de la empresa que se propone divulgar “works of literary and cultural importance that are nevertheless not very well known outside their original national boundaries or linguistic communities” (Collection UNESCO... 2000: 13).